Pertenece al grupo de poetisas andalusíes cuya producción poética se enmarca entre los siglos XI y XII, junto a otras autoras como Wallāda bint al-Mustakfī, Nazhūn bint al-Qalā'iyya, Umm al-Kiram o Sāra al-Halabiyya. También son contemporáneas Al-Abbadiyya, esclava, en Dénia; Hind, tañedora de laúd y esclava cantora, en Xàtiva, y en Valencia Amat Al Aziz y Al Arudiyya, gramática y maestra de métrica. Todas ellas siguen una genealogía que comienza con Hassana at-Tamimiyya la primera poeta andalusí de la que tenemos noticia.
Fue contemporánea de la gramática, poeta y lexicógrafa, Lubna, responsable de la biblioteca de Al-Hakem II, la más grande del planeta en ese entonces. También de la astrónoma (de incierta existencia) Fátima de Madrid o de las grandes gobernantes yemeníes Asma y Arwa al-Sulayhi, esta última con un próspero reinado de más de 50 años y a la que nombraban en la jutba. Fue posterior a Fatima Al-Fihri, del siglo IX, la gran benefactora de la cultura y la creadora de la mezquita y universidad de Qarawiyyin, en Fez, considerada como la más antigua institución de estudios superiores todavía en marcha.
Tuvo conciencia de autoría, en la línea de otras autoras anteriores como Dhuoda (siglo IX), autora del primer tratado pedagógico de la Edad Media o contemporáneas, como María la bordadora (siglo X), maestra medieval del bordado, Ende, iluminadora del beato de Gerona (siglo X) o Roswhita de Gardersheim, escritora en latín de comedias clásicas.
Fue contemporánea también de las trovadoras como la Condesa de Dia o Maria de Ventadorm, la gran polímata Hildegarda de Bingen, la médica Trotula de salerno y la pensadora Eloísa del Parácleto. También los Lais de María de Francia pertenecen a esta época, así como la obra histórica La Alexiada, escrita por la princesa bizantina Anna Comnena.
También contemporáneas en el ámbito árabe son destacables ‘Ulayya bint al-Mahdī, reconocida poeta y música, hermanastra de Harun Al-Rasid. Así como una de las más reconocidas poetas medievales, la esclava cantora abbasí Faḍl al-Shāʻirah. Son también de la época (siglo XI) grandes gobernantes yemeníes como Arwa al Sulayhi y Asma al Sulayhi. Todas ellas tuvieron un papel importante en la conservación y difusión de la cultura.
Los textos conservados de las poetisas de al-Ándalus demuestran que eran mujeres cultas y pertenecientes a clases altas en su mayoría -pero donde encontramos también ejemplos como esta poeta- con afán de libertad y que cantaron al amor sin renunciar al erotismo explícito.